Sin embargo, el cambio más llamativo llegó en los colores del escudo, mudando del azul y blanco, del escudo de la fundación, al rojo y blanco que han marcado al Granada desde entonces. En la parte azul tenía escrita una G de color blanco que ocupaba prácticamente toda la zona, y en la zona de color blanco tenía una R de color azul y la silueta de una granada, fruto que es uno de los símbolos de la ciudad y que ha permanecido desde entonces en el escudo del club.